Cuando llegamos a la mayoría de edad, sin querer adoptamos comportamientos que nos obliga la sociedad. Por ejemplo, ya no debemos parar solo con personas de nuestro mismo sexo (cosa que es común ver en la época escolar), otra cosa indispensable es tener lo último en tecnología, hoy en día sino tienes un mp3, una cámara digital o cualquier cosa que este como “lo nuevo” en cualquiera de las tiendas por departamentos, no estas en nada, pobre el que se junte contigo.
Todos los chicos que ya pasaron los 18 años, suelen ir a las mejores discotecas que existan Lima, es lo que “pone”. Cuando tienes 20 años, es raro que te vean por la noche con tu grupo de amigos en los juegos mecánicos, en vez de estar en algún local tomando o bailando. Aunque parezca tonto, NOSOTROS LO HICIMOS!
Faltaba media hora para las siete de la noche, cuando recibí la llamada de Mili, una de mis mejores amigas, por medio de la cual me informó que saldríamos algunos de la promoción junto con Veronik, una amiga de Canadiense de Linda, a Larcomar. Me pareció divertido así que no dude en cambiarme y esperar la hora del encuentro. El punto de encuentro seria la casa de Mili a las 8pm., salí a las 8 en punto, total vive frente a mi casa, no demoro nada en llegar.
Ya todos estábamos listo para salir (Linda, Mario, David, Mili y yo), solo faltaba Veronik, pero a ella la encontraríamos en Larcomar.
Tomamos un taxi, muestro destino era Larcomar, sin embargo tuvimos que bajar en el Parque del Amor, ya que ahí encontraríamos a Veronik.
Apenas llego, nos fuimos caminando a Larcomar.
Al llegar, lo primero que hicimos fue caminar un rato y luego ir a jugar al bowling como lo habíamos acordado. Alquilamos las zapatillas, la pista por una hora y... listos para jugar!
Mientras jugamos hicimos nuestros pedidos de comida, por cierto llego una orden de mas... eso!!! Jajaja. Todo iba bien, hasta que en uno de mis tiros, juro que aun no se como paso, no logre tirar la bola hacia delante, sino hacia atrás, imagínate como una bola de 10 kilos rodando hacia atrás y golpeando la maquina de una familia que estaba a nuestro lado...roche total! Pero fue un chongo, que quedo grabado en la cámara digital de Mili. No sabia que me estaban filmando(Bien Marito! Siempre listo).
Al terminar la hora de bowling, nos fuimos a jugar a MOY.
Lo primero que hicimos fue subir a los carros chocones, éramos seis, justo la cantidad de carros que habían en esa pequeña pista. Éramos los únicos chicos de 20 años sentados en esos juegos, lo máximo.
Luego estuvimos jugando en todos los juegos posibles y juntando los tickets que dan como premio para luego canjear algo.
Estuvimos hasta las 12:30 aproximadamente, me hubiera quedado mas tiempo, pero el chico que apagaba las maquinas solo estaba esperando que nosotros nos fuéramos.
A las 12:45am, nos retiramos de Larcomar, esperamos que recogieran a Veronik y nos retiramos en un taxi.
Esa noche no tuvo nada de alcohol, si algunos Montana Menthol, indispensables en mis salidas, estuvo cargada de diversión, risas y amigos, suficiente para hacerla inolvidable.
Todos los chicos que ya pasaron los 18 años, suelen ir a las mejores discotecas que existan Lima, es lo que “pone”. Cuando tienes 20 años, es raro que te vean por la noche con tu grupo de amigos en los juegos mecánicos, en vez de estar en algún local tomando o bailando. Aunque parezca tonto, NOSOTROS LO HICIMOS!
Faltaba media hora para las siete de la noche, cuando recibí la llamada de Mili, una de mis mejores amigas, por medio de la cual me informó que saldríamos algunos de la promoción junto con Veronik, una amiga de Canadiense de Linda, a Larcomar. Me pareció divertido así que no dude en cambiarme y esperar la hora del encuentro. El punto de encuentro seria la casa de Mili a las 8pm., salí a las 8 en punto, total vive frente a mi casa, no demoro nada en llegar.
Ya todos estábamos listo para salir (Linda, Mario, David, Mili y yo), solo faltaba Veronik, pero a ella la encontraríamos en Larcomar.
Tomamos un taxi, muestro destino era Larcomar, sin embargo tuvimos que bajar en el Parque del Amor, ya que ahí encontraríamos a Veronik.
Apenas llego, nos fuimos caminando a Larcomar.
Al llegar, lo primero que hicimos fue caminar un rato y luego ir a jugar al bowling como lo habíamos acordado. Alquilamos las zapatillas, la pista por una hora y... listos para jugar!
Mientras jugamos hicimos nuestros pedidos de comida, por cierto llego una orden de mas... eso!!! Jajaja. Todo iba bien, hasta que en uno de mis tiros, juro que aun no se como paso, no logre tirar la bola hacia delante, sino hacia atrás, imagínate como una bola de 10 kilos rodando hacia atrás y golpeando la maquina de una familia que estaba a nuestro lado...roche total! Pero fue un chongo, que quedo grabado en la cámara digital de Mili. No sabia que me estaban filmando(Bien Marito! Siempre listo).
Al terminar la hora de bowling, nos fuimos a jugar a MOY.
Lo primero que hicimos fue subir a los carros chocones, éramos seis, justo la cantidad de carros que habían en esa pequeña pista. Éramos los únicos chicos de 20 años sentados en esos juegos, lo máximo.
Luego estuvimos jugando en todos los juegos posibles y juntando los tickets que dan como premio para luego canjear algo.
Estuvimos hasta las 12:30 aproximadamente, me hubiera quedado mas tiempo, pero el chico que apagaba las maquinas solo estaba esperando que nosotros nos fuéramos.
A las 12:45am, nos retiramos de Larcomar, esperamos que recogieran a Veronik y nos retiramos en un taxi.
Esa noche no tuvo nada de alcohol, si algunos Montana Menthol, indispensables en mis salidas, estuvo cargada de diversión, risas y amigos, suficiente para hacerla inolvidable.
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